MAITE GUERRERO_A ciegas

BENJAMÍN

Con 74 años y ya jubilado de su trabajo como vendedor de cupones, se dedica ahora a lo que vocacionalmente le llevó a obtener en 1958 el Título de Maestro para la enseñanza de ciegos. Actualmente da clases de forma voluntaria en la O.N.C.E Badalona enseñando a leer y escribir en sistema braille. Este sistema que responde al nombre de su creador, es en la actualidad el sistema de lectura y escritura punteada universalmente adoptado en los programas de educación de invidentes.

El braille consiste en un código de 63 caracteres, constituidos por un rectángulo de seis puntos que conforman una figura determinada, unidos en líneas sobre el papel y que pueden leerse pasando las yemas de los dedos sobre el escrito.
La lectura en Braille no presenta excesiva dificultad respecto a la lectura en tinta. Los elementos básicos en el proceso de adquisición de la lectura son los mismos para ciegos y videntes. Por tratarse de un sistema lectoescritor que usa un código diferente al alfabético en tinta,requiere de un aprendizaje distinto.

La lectura mediante el tacto se realiza letra a letra y no a través del reconocimiento de las palabras completas, como sucede en tinta. Por ello se trata de una tarea lenta en un principio, que requiere de una gran concentración difícil de alcanzar a edades tempranas. Cuando el invidente conserva algún resto de visión puede además leer textos a través de lupas TV que amplían la imagen a diferentes tamaños en función de las necesidades.

Para sus clases Benjamín cuenta con una gran variedad de material tiflotécnico específico para ciegos y deficientes visuales, tales como máquinas de escribir, instrumentos de cálculo, lectores ópticos....y juegos de mesa de fácil manejo adaptados también a sus necesidades. El resultado es que la relación profesor-alumno acaba siendo igual de enriquecedora para las dos partes, ejerce incluso en ocasiones como una ayuda psicológica para personas que perdieron la vista a edades tardías. Y sobretodo enseña a sus alumnos a quererse y aceptarse a través del humor.

ANTONIO

“A veces Dios decide ponerte a prueba” Una mañana de hace cinco años Antonio se encontraba en el jardín de casa de su hermana eliminando malas hierbas y arreglando el terreno, habían robado en el banco que quedaba justo al lado de la casa, los atracadores escapaban y en la huída se toparon con él. Sin mediar palabra, recibió el disparó que le dejó completamente ciego. En aquella época estudiaba filosofía y teología, su sueño era ser cura y estaba a un año de alcanzar su meta. Cuando el oftalmólogo de Guinea conoció su caso pasó a expedirle un documento de evacuación para ser operado en Barcelona, en su precaria clínica de Guinea no contaba con los medios suficientes para realizar aquella intervención. El documento tardó más meses de lo previsto y aquí no pudieron hacer nada por conservarle la vista, de haberse hecho con carácter inminente la operación podría haberle salvado la vista. Su único pensamiento era el suicidio, no era capaz de concebir su vida en Guinea siendo ciego, sabía que sería despreciado, acusado de víctima de algún tipo de brujería o castigo divino. En su país la ceguera no es una realidad a la que se haga frente con ayudas, su población no ha sido debidamente informada ni sensibilizada al respecto, por ello están en proyecto la creación de colectivos que den respuesta a sus limitaciones y necesidades.

En la actualidad, Antonio vive en Barcelona y es uno de los 9 camareros ciegos que trabaja en el primer restaurante a oscuras de España, de la cadena Dans Le Noir. Durante la comida los camareros, invidentes, se convierten en los guías de los comensales para los que supone un viaje directo a los más remotos y olvidados sentidos, un ejercicio de tolerancia y sensibilización hacia este colectivo de discapacitados.

Antonio participa activamente en la coral de la iglesia todos los domingos, toca el órgano como acompañamiento y en su casa celebra reuniones con los amigos para disfrutar de su afición por este instrumento.

Vive en el barrio de Sants con su novia Pilar a la que conoció en la ONCE y que conserva un 0,09% de vista. La convivencia con ella y su gran fe cristiana han sido sus dos grandes pilares en el proceso de adaptación a su nueva vida.

GENARO

“….y hemos tenido que aprender a caminar despacio”, con esta frase resume Genaro los múltiples esfuerzos que deben realizar los invidentes para derribar las barreras de un mundo cargado de estímulos visuales. Caminar guiado por un perro que dirige sus pasos y es casi una extensión de sí mismo fue un reto al principio, tras establecer los necesarios vínculos de confianza casi puede decirse que son uno. Éste catalán de 47 años perdió completamente la vista a causa de un accidente, actualmente trabaja para la FCMC (Fundació Cecs Manuel Caragol) que como entidad benéfico-asistencial se mantiene del apoyo de subvenciones y donaciones de empresas y particulares. Su consigna es creer que la ceguera no debe ser un punto de inflexión negativo en la vida de nadie, sinó una oportunidad para educar otros sentidos que a causa de la vista quedaron anulados.

Gracias a la labor de Genaro las personas invidentes o con deficiencias visuales pueden acceder a la tecnología. El ordenador es ya un elemento imprescindible en nuestras vidas, actualmente se han adaptado y desarrollado ciertas aplicaciones que mediante ayudas de audio (software Orpheus de la compañía Dolphin Computer Access) y braille permiten una integración total de las personas ciegas en el mercado laboral.

Genaro hace 25 años que perdió la vista y actualmente es profesor de informática, su compañero inseparable se llama Sam y es un golden retriever entrenado en la FOPG (Fundación ONCE del Perro-Guía) de Madrid. Ésta fundación nace en 1990, hasta el momento la única escuela de adiestramiento para perros guía se ubicaba en EE.UU, gracias a ellos más de mil perros guía conducen a personas ciegas por nuestras calles de forma más segura y autónoma.

PERGENTINO

Con 5 años padeció poliomielitis, y a los 23 años su falta de visión empezó a ser notable. Este virus afecta a varias partes del sistema nervioso central, en alguna de sus fases puede causar ciertos grados de ceguera y parálisis más o menos severa.
Hace tres años que dejó Guinea para venir a vivir aquí. El oftalmólogo cubano que le trataba en Guinea decidió expedirle un documento de evacuación para venir a Cataluña y ser intervenido. Al llegar aquí fue operado de la vista, no se pudo hacer nada para recuperarla parcialmente, únicamente quedó estabilizada y ahora goza de cierto resto visual (en torno a un 0,1%). Aunque en un inicio fue acogido por su condición de paciente, esta misma cooperativa le ofreció la oportunidad de quedarse y formarse académicamente, con la condición de que una vez acabara sus estudios debía volver a su país a poner en práctica los conocimientos adquiridos aquí. Con esta idea, Pergentino empezó a estudiar un grado superior de integración social, cabe decir que aún siendo contradictorio tuvo muchos problemas para integrarse en el centro, el profesorado tardó en confiarle la ayuda necesaria que a día de hoy ha de buscar en sus compañeros.Este año obtendrá el título con el que volverá a Guinea con un proyecto para sensibilizar a la población sobre la ceguera, su iniciativa es resultado de la mala prensa que tienen los ciegos en su país, lejos de obtener ayudas son repudiados y olvidados por las instituciones y la sociedad en general.

Vive en Badalona en una casa con cuatro jóvenes extranjeros que vinieron aquí a través del proyecto de la red de centros de acogida Casa d’ Estudiants ( La Rotllana ), un proyecto de cooperación internacional.

El material que necesita se lo facilita la ONCE, aunque es una de las pocas facilidades que tiene por no ser ciudadano español, los miembros no afiliados no optan a muchas de las actividades que de manera gratuita realiza la ONCE en sus instalaciones. Gracias a la máquina de escribir PERKINS que le cedieron y el reproductor parlante de libros DAISY puede seguir las clases con absoluta normalidad.

Pergentino se ha adaptado totalmente a su falta de visión. En los lugares que ya conoce, el uso de bastón es innecesario y sólo cuando acude a lugares que visita por primera vez se convierte en un elemento imprescindible. La memoria espacial es lo primero que el ciego se siente obligado a desarrollar, por ello cuando ha visitado varias veces el lugar crea un mapa mental perfecto, incluso sube las escaleras de su casa corriendo.

TERESA

Hace diez años padeció el síndrome de stevens-johnson como reacción a un medicamento que le suministraron al contraer la malaria. Su cuerpo experimentó una grave reacción alérgica que le tuvo años hospitalizada, la piel se vió seriamente afectada y también los ojos y el sistema respiratorio.

Perdió lágrima y sus ojos sufren constantemente de intensos dolores especialmente cuando están expuestos al sol durante largos periodos, ha perdido mucha visión.

Afortunadamente para ella todavía hay cosas donde la visión no es imprescindible. Disfruta cocinando platos exquisitos de su país donde el olfato y el gusto son los verdaderos protagonistas.

Ahora Teresa tiene 28 años y vino de Camerún a Barcelona para ser operada de la vista, ésta operación es algo complicada y el resultado incierto. Mientras llega la operación da gracias por haber sobrevivido a esta enfermedad, se muestra profundamente optimista y disfruta con la visión, aunque reducida, de todo lo que le rodea.
Su sueño es trabajar en las Naciones Unidas.